Sin repetir COLORES

Claudia Hernández García[*]

Phi (ɸ) es otro número menos conocido que pi, pero mucho más fascinante en muchos aspectos. Suponga que le planteo la siguiente pregunta: ¿qué tienen en común la deliciosa disposición de los pétalos de una rosa, la famosa pintura de Salvador Dalí Sacramento de la Última Cena, las magníficas conchas espirales de los moluscos y la cría de conejos? Aunque resulte difícil de creer, todos estos ejemplos dispares entre sí tienen en común un número determinado o una proporción geométrica conocida desde la Antigüedad, un número que en el siglo XIX recibió la distinción de «Número Áureo», «Proporción Áurea» y «Sección Áurea». Un libro publicado en Italia a principios del siglo XVI tuvo la osadía de denominarlo «Proporción Divina».

En la vida cotidiana, utilizamos la palabra «proporción» tanto para definir la relación comparativa que se establece entre las partes de las cosas en relación con el tamaño o la cantidad, o bien cuando queremos describir una relación armónica entre diferentes partes. En matemáticas, la palabra «proporción» se utiliza para describir una igualdad tipológica: nueve es a tres como seis es a dos. Como veremos más adelante, la Proporción Áurea ofrece una mezcolanza intrigante de ambas definiciones que, al ser definida matemáticamente, se le atribuyen cualidades armónicas placenteras.”

MARIO LIVIO

Tomado de Mario Livio (2006). La proporción áurea. La historia de phi, el número más sorprendente del mundo. Traducción de Daniel Aldea Rossell e Irene Muzás Calpe. Barcelona: Ariel, p. 9.

Mario Livio es un astrofísico y autor israelí-estadounidense que ha investigado sobre la explosión de supernovas, la energía oscura, los agujeros negros y la formación de sistemas planetarios. En 2009 ingresó a la Asociación Estadounidense para el Avance de la Ciencia por sus contribuciones a la astrofísica y por su extensa trayectoria en comunicación de la ciencia a públicos amplios.

c Actividad
Actividad

En esta edición de Correo del Maestro les proponemos una actividad para estudiantes de sexto de primaria en adelante. Cuando la hayan terminado, les sugerimos dedicar un tiempo para que, quienes así lo deseen, expliquen cómo la resolvieron, qué estrategias no les sirvieron, lo que les pareció más sencillo o lo que más se les dificultó.

Este reto en realidad es un dos en uno. El primer paso es colorear los siguientes 16 cuadrados con ocho colores distintos: cuatro para la mitad superior y cuatro para la mitad inferior. Aunque puede elegirse libremente la combinación de colores (digamos que para la mitad superior se usen rojo, verde, azul y naranja, mientras que en para la parte inferior se ocupen rosa, amarillo, morado y lima), hay que colorearlos de manera que la dupla de colores de un cuadrado no se repita en ningún otro, es decir, todos los cuadrados deben tener una combinación de colores única.




La segunda parte del reto consiste en acomodar los cuadrados en una cuadrícula de 4 × 4 de manera que ninguno de los ocho colores se repita en las filas ni en las columnas.


c Soluciones

Soluciones

Una manera ordenada para colorear los cuadrados es la siguiente:



Y a continuación presentamos una de las muchas maneras en que podemos armar la cuadrícula de acuerdo con las instrucciones:



NOTAS

* Técnica académica de la Dirección General de Divulgación de la Ciencia, UNAM.

c Créditos fotográficos

- Imagen inicial: Shutterstock

- Portada del libro La proporción áurea. La historia de phi, el número más sorprendente del mundo: Digitalización del original